Galerías de curiosidades
Dado que la mayoría de colecciones pronto aumentaba de volumen éstas ya no se guardaban sólo en los muebles destinados a ese uso sino que invadían salas enteras con varias recámaras. Estos pequeños museos permanecían cerrados y normalmente eran secretos. De ellos sólo podían disfrutar el propio dueño y las amistades más allegadas.
Los objetos que se podían encontrar en estos pre-museos se clasificaban bajo cuatro categorías, a saber, artificialia, en la que se agrupaban los objetos creados por la mano humana; naturalia, donde se agrupaban criaturas y objetos que provenían del mundo natural; exotica, donde se encontraban plantas y animales exóticos; scientifica, en la que se agrupaban objetos científicos.
La moda de los gabinetes decayó y éstos empezaron a desaparecer a finales del siglo XVIII y durante el XIX. Los objetos que contenían y que eran considerados de importancia museística fueron conservados en los museos de historia natural y los objetos pertenecientes al mundo del arte, en galerías y museos también.
Y quizá os preguntaréis, y por qué esta entrada. Pues bien, me llamó la atención el pasado viernes una noticia del informativo de A3, que por cierto es muy de gabinete de curiosidades, que cubría la inauguración de un nuevo museo en la ciudad de Nueva York y que amplía la gran oferta cultural de la ciudad ofreciendo una exposición permanente basada en objetos raros y curiosos como una vaca con dos cabezas, una cabeza de mono momificada y reducida, etc. El museo en cuestión se llama Ripley's Believe or Not! y a dicha inauguración asistieron la mujer barbuda, la mujer con las uñas más largas del mundo y demás frikis... He estado consultando la página web del museo y se ve que tienen "franquicias" por todo el mundo y no parece muy serio, pero bueno para divertimento quizá valga.
Si queréis saber un poco más sobre estas colecciones de rarezas, que sí son realmente interesantes, os recomiendo los siguientes libros y recursos web:
PRESTON, Douglas; CHILD, Lincoln. Los asesinatos de Manhattan. Barcelona: Plaza & Janés, 2003.
Una novela cargada de suspense, acción, que te mantiene enganchado hasta el final, que es bastante bueno, y que tiene lugar y justificación en las antiguas galerías de curiosidades. Os la recomiendo sobretodo para este verano, tirados en la playa o en la hamaca a la orilla de la piscina. Mientras la leía maldije internamente haber dejado de morderme las uñas porque lo único que quería era mordérmelas mientras divagaba sobre el final y el asesino.
- Gabinetes de curiosidades
- Los primeros museos y gabinetes reales. Museo de América.
- Cabinets de curiosités