martes, 29 de enero de 2008

¿Censura de los libros infantiles?

Recuerdo que, en el cuarto de costura, alguien leyó en un libro de piedad una historia supuestamente real. Era así. Muere una niña de cinco años y aquella misma noche, cuando su madre, deshecha en llanto y de rodillas, está rezando por su pequeña, ésta se le aparece y le dice:
<<
No merece la pena que reces por mí, mamá, porque unos minutos antes de morir tuve un pensamiento impuro, del que no me dio tiempo a hacer un acto de contricción, y estoy en el infierno.>>
Había, creo recordar, una ilustración: la madre con los ojos desorbitados y la boca abierta en un alarido de horror y la niñita envuelta en llamas. Casos como éste hacen que pese a mi liberalismo , crea que sí debe existir una censura para los libros infantiles.


[Extraído del libro que estoy leyendo con fruición Habíamos ganado la guerra de Esther Tusquets, página 54.] [La fotografía no sé de quién es pero la he sacado este blog]

4 comentarios:

bravecoast dijo...

no se, ese relato que cuentas debio pasar hace unos años (se nota mucho la huella del franquismo en ella), ahora no me imagino algo asi en un libro de literatura infantil. pero yo no soy un especialista en esta literatura y tu si ;)

Pilar dijo...

Jodo... qué gore-heavy el librico... bueno, en realidad los libros tipo "las niñas candorosas" y piosidades variadas tenían su punto.
Yo creo que la literatura infantil (dsd mi punto de vista, claro) debe tener un límite pero noooOOoo, no queremos más obras educativas!
que vuelvan los cinco, los siete secretos y Enid Blyton.

Anónimo dijo...

la foto es genial...

Anónimo dijo...

Espero que no estés pensando todavía en el relato que cuentas ,sacado de un libro infantil,amiga.Fíjate en varios puntos ,para tu tranquilidad:-No se podían decir otras cosas diferentes en aquella época.La ñoñería parecía lo más normal del mundo.-Una niña de cinco años es incapaz de saber qué es un pensamiento impuro,en nuestro tiempo y en aquel tiempo,que también fue nuestro.No me interesa lo más mínimo saber nada del autor-a de dicho libro,pues se lució el pobre.-Hay una especie de "censura" actualmente,que no es censura sino mucho sentido común cuando se escribe un libro dedicado a los niños.-Mejor hubiera sido que la censura le hubiera prohibido al autor,publicar todo el libro del que hablas.Así nos iba a los niños-as de esa época.El miedo era el monarca que regía todo cuanto hacíamos.Para tu sosiego ,te diré que ,afortunadamente, hoy en día tales libros ya no se escriben y los que se escriben ,aun conservando candor están muy lejos de esas pesadillas que tuvimos que tragarnos.Libérate de ese recuerdo,mantén únicamente los recuerdos buenos de esa época ,que también tuvimos bastantes ,a pesar de todo.Suerte,amiga.Laura Antonino Abad-Pedagogía.