Trancas y Barrancas (II): Ha vuelto el Hormiguero
El Hormiguero ha vuelto después de una larga temporada de parón y ha vuelto con más potencia que nunca. Después del primer programa los medios de comunicación ya hablaban de la emisión de la noche anterior en la que debutó un nuevo colaborador: Toño, el diablo sobre ruedas.
Toño padece parálisis cerebral, pero si no fuera por la silla de ruedas y su imposibilidad de mover la extremidades no lo dirías. Un monólogo de impresión me dejó a mi también casi en estado catatónico al principio, por no saber si aquello tan políticamente incorrecto lo estaba viendo de verdad, pero a los pocos segundos ya estaba destornillándome de la risa. Y es que no tienen desperdicio. Se nota la calidad del humor negro. Se nota, se palpa, que este hombre se distancia para reírse de su propio drama, que quizá para él no sea un drama. Quizá para él sea un modo de vida. Será que para los demás es un drama...
Toño padece parálisis cerebral, pero si no fuera por la silla de ruedas y su imposibilidad de mover la extremidades no lo dirías. Un monólogo de impresión me dejó a mi también casi en estado catatónico al principio, por no saber si aquello tan políticamente incorrecto lo estaba viendo de verdad, pero a los pocos segundos ya estaba destornillándome de la risa. Y es que no tienen desperdicio. Se nota la calidad del humor negro. Se nota, se palpa, que este hombre se distancia para reírse de su propio drama, que quizá para él no sea un drama. Quizá para él sea un modo de vida. Será que para los demás es un drama...
2 comentarios:
uuiixxx al principio da pelín de yuyu porque el hombre no sabes si esta ahi obligado pero luego ya se ve que no que le mola. Lo mejor lo de la AVT jeje!
si es que esta gente es muy salada, mira tu Stephen Hawking.
Publicar un comentario