Uno de los museos más escondidos de Barcelona és el Museu del Perfum que se encuentra dentro de la Perfumería Regia. Hace unos meses pude descubrirlo porque mi suegra me invitó a una mañana de tratamientos faciales en dicha perfumería (qué espléndida es mi suegra) y mientras esperábamos nos invitaron a visitarlo. frascos actuales de Chanel
El museo se inauguró en 1963 con la intención de mostrar la evolución de los frascos y recipientes de perfumes a través de la historia. Así en el museo se pueden contemplar frascos para esencias, perfumes y aguas de colonias que datan de las épocas de los faraones egipcios.
una botellita del mítico Miss Dior, en cristal tallado, de 1949
El museo está dividido en dos áreas: en la primera se encuentran perfumadores, recipientes para ungüentos, pebeteros y demás que datan desde épocas antiguas hasta la edad moderna y en la segunda se encuentran todos los frascos a partir del siglo XVIII, desde la industrialización de la perfumería. La primera área está ordenada cronológicamente para poder observar la evolución de los frascos y recipientes y en la segunda área los frascos y botellitas están ordenados por marcas.
Les quatre estacions de Lubin colección de frasquitos antiguos de Chanel, la mayoría de la colección Les Exclusifs
un frasco bien grande de Nenuco junto a un frasco, también muy grande, de Agua de Sevilla en una edición especial conmemorativa por la boda de la Infanta Elena
Es una visita muy interesante por la cantidad de curiosidades que se pueden chafardear. En su página web también se puede hacer un pequeño tour virtual y ver algunos de sus objetos más curiosos. Mis favoritos son estos: dos ediciones especiales de Varon Dandy que representan un hombre y una mujer con sombrero de copa (1933); una colección de esencieros de vidrio del siglo XIX y un juego de tocador de nácar con un mecanismo que esconde cuatro pebeteros de esencias.
2 comentarios:
Me encanta cuando nos llevas de tour virtual :)
Anda, no lo conocía. ¡Qué curioso! Recuerdo el frasco de Nenuco que sale en la foto.
Un saludo,
Tanakil.
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