miércoles, 14 de mayo de 2008

48 horas sin parar de hablar de literatura infantil

Dos veces al año me paso 48 horas sin parar de hablar de literatura infantil. 96 en total. Si le sumo todas las horas que dedico al año a preparar esas reuniones no sé cuánto sale, pero son muchas horas, muchos días y quizá algún mes para analizar y seleccionar los mejores libros editados para los lectores infantiles y juveniles en España.

Un equipo de 25 personas que nos reunimos en Madrid, que llevamos los libros que nos han gustado más, a cuestas, para que los demás puedan leerlos y valorarlos también. A veces coincidimos en nuestras opiniones, otras muchas no. A veces se nota la tensión en el ambiente cuando hay que recurrir a los votos para aceptar o rechazar un libro, más si es uno "de los tuyos", cuando escuchas opiniones en contra de autores o títulos que consideras imprescindibles. Pero como me dijo hace unos días un compañero de trabajo, es una valoración subjetiva por muy especialistaso enteradillos que podamos ser en literatura infantil. Y aunque casi nos tiremos los cuchillos al final, cuando llega la hora de la pausa-café todos amigos y a compartir pastitas, como en el Congreso, vamos.

Al final podemos estar contentos que aunque queden libros en el tintero, el resultado final, la selección que se publica en forma de guía son libros de calidad e interés, los principios que nos rigen como seleccionadores, pero estamos tristes porque en un trabajo que es de gran utilidad para profesores, bibliotecarios y padres queda relegado al desconocimiento por la escasa difusión de la literatura infantil en los medios. Hemos organizado ruedas de prensa a las que grandes medios han enviado a pobres becarios que ni sabían a qué venían. Quizá tendríamos que organizar unos premios y que a la entrega invitáramos a la Princesa, así todo el mundo asistiría... Es triste que ni tan siquiera los editores seleccionados en la guía les importe lo más mínimo el hecho en sí.

Quizá en nuestro país los índices de lectura subirían si nuestra sociedad apostara por la lectura y las bibliotecas. No sólo los medios. O ¿no podrían hacer mucho más las administraciones públicas por el pobre o nulo estado de las bibliotecas escolares?

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Para que acuda mucha prensa sería mejor invitar a la hermana de la princesa, je, je, je...

Leox dijo...

Hola:
Lindo blog , estaba viendo tu reseñas de libros y veo que compartimos el placer de Murakami.
En tu lista de de Library Thing , también tienes buenos libros. Broklyn Follies es espectacular , y vila matas también me encanta.
saludos desde Chile. Te sigo leyendo
Leo fumopio
-devolución y préstamo-