jueves, 23 de noviembre de 2006

La mente magnética


En el País Semanal del último fin de semana se publicó un artículo titulado La mente magnética que hablaba sobre los efectos de la terapia de electromagnetización.
Creí entender, perdonad mi escaso conocimiento de estos lares, que aplicando una especie de imanes sobre la cabeza y descargando frecuencias electromagnéticas sobre el cerebro se conseguían buenos resultados para paliar la depresión, la ansiedad y se conseguían eliminar las paranoias que acompañan a los enfermos de esquizofrenia.
El artículo empezaba con un ejemplo ilustrativo de las aplicaciones no referentes a la salud que tenía el invento. Elena, es una joven que quiere aprender a tocar el piano rápidamente. Se dirige a la consulta y pide que le apliquen frecuencias electromagnéticas en la parte del cerebro que regula el aprendizaje y seguidamente se va a la academia de música. En una clase Elena habrá aprendido los principios fundamentales que entraña el aprendizaje de piano. No tocará el piano como una profesional, pero podrá defenderse y progresar muy rápidamente. A una velocidad extraordinaria.
Otro ejemplo, era el de otra chica que tenía al día siguiente la exposición de un proyecto de empresa muy importante a su jefe. Pedía electromagnetización en la parte del cerebro que regula la memoria, los nervios, el lenguaje, etc y se aseguraba una exposición brillante.
Toda esta parte del artículo me recordó a Matrix cuando Neo se le descarga en el cerebro todo tipo de artes marciales y las asume en un plis.
El artículo también apunta el lado negativo de la electromagnetización. Como en toda buena película de espías, este arma sería muy peligrosa si cayera en malas manos. Un botón del mando y los imanes colocados en el sitio ideal y no podríamos reconocernos a nosotros mismos, podríamos volvernos muy egoístas o demasiado generosos, volcados completamente a los demás, borrarnos situaciones de nuestro cerebro, dejar de ver objetos que tenemos delante o modificar nuestro pensamiento respecto determinados temas, vaya, muy a lo Desafío Total.
Interesante al fin y al cabo, yo me apuntaba a que me borraran cosas de mi cerebro y también apuntaba a que borraran el dolor y el sufrimiento que se le causa a los demás.

No hay comentarios: